Octubre

Eventos

Recién comenzado el nuevo curso, el señor Barroso se hay inmerso en multitud de proyectos. Nosotros seguimos publicando el resto del álbum que nos ha cedido amablemente.

It hurts and I’m boring

He is stupid

Peo has a pain in his foot and he is boring

Because of this he will do some activities to pass the time.

El Gran Libro de Autoayuda del Señor Barroso.

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 Dinero

También puedes convertirte en anacoreta y alimentarte de bayas, pero piensa que los que sí creen que se vive mejor con dinero un día descubrirán donde te escondes, expropiarán el terreno y construirán un complejo hotelero y turístico por mucho que sea (o sobre todo si es) paraje natural el lugar que habías escogido. Por lo que te aconsejo que asumas que el dinero tiene un lugar preponderante en la sociedad en la que vivimos, y que tengas en cuenta que la mayoría de los que no le dan importancia es porque son incapaces de obtenerlo, por lo menos en grandes cantidades. Sólo si somos conscientes de la realidad podremos esquivarla.

Se ha disertado mucho de los males causados por el dinero (particularmente han predicado sobre este tema los que nos hacen trabajar para obtenerlo), y no dudo de la autenticidad de esta aseveración, aunque, según mi experiencia, lo verdaderamente nefasto es su carencia, la cual nos causa inseguridad, estrés,  irritabilidad, y, en casos extremos, hasta hambre.

¿Cuánto necesitamos para ser felices? Hay estudios realizados por prestigiosos científicos que sitúan el límite máximo en un sueldo de sesenta mil euros[1], ya que, según ellos, a partir de esta cantidad da más problemas que felicidad. Pero estos eruditos no han tenido en cuenta el teorema del vecino:

Tengamos un vecino al que odiamos intensamente; suele suceder que este despreciable elemento tiene un televisor más grande que el nuestro, un coche mejor y hasta su mujer parece estar más buena[2]. Si este ser (omitimos intencionadamente el calificativo de humano) tiene un sueldo de 12.000 euros anuales, para ser felices nos bastará con  hacernos con unos honorarios de 15.000 euros al año; pero si por el contrario lo que gana el energúmeno en cuestión es 1 millón doscientos mil euros, no seremos felices hasta conseguir obtener un millón y medio de euros, por lo que el cálculo de sesenta mil euros puede quedar muy por debajo de nuestras necesidades reales.

Quizás en este momento te estés preguntando si tienes algún vecino al que odies y si, en caso afirmativo, sus emolumentos son superiores a los tuyos. Siempre hay algún vecino al que odiar, pero si tienes serias dudas o vives aislado en la montaña, también puedes escoger a un pariente o amigo cuya paga sea inferior a la tuya; respecto a la diferencia salarial, no tiene importancia cuantitativa sino cualitativa, lo que va a dar sentido a nuestra existencia es la satisfacción de poder pasarle por la cara nuestro altísimo nivel de vida. Pero si no puedes evitar odiar a alguien que gane más que tú, la única solución es que te busques unos ingresos adicionales.

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[1] Debido a la vocación de este libro de convertirse en un clásico de la literatura, con sus consiguientes reediciones y estudios sobre él, se recomienda adaptar las cifras a la inflación pertinente.

[2] Si eres del sexo femenino cambia vecino por vecina y la última frase por “y su marido parece ser más inteligente”, (ostia, he vuelto a hacer un comentario sexista, ¡pues así se va a quedar!) lo esencial es que se capte el sentido sutil, casi gnóstico, de la proposición.